![](http://www.cdc.gov/spanish/niosh/images/spacer.gif) La profesión de Bomberos es conocida por ser una de las ocupaciones más peligrosa, pero en nuestro trabajo la causa más frecuente de muerte son las cardiopatías y no las quemaduras o la inhalación de humo. La administración de Incendios de Estados Unidos, una rama de la Federal Emergency Management Agency, analizo todos los resúmenes narrativos de las muertes de personal de Bomberos asociadas con la lucha contra incendios que ocurrieron en los Estados Unidos entre 01 de Enero de 1994 y el 31 de Diciembre de 2004 y concluyeron que gran parte de las muertes del personal de bomberos en cumplimiento del deber, el 45% de las muertes, se debieron a causas cardiovasculares. Se han propuesto varias explicaciones biológicamente plausibles para la alta mortalidad por eventos cardiovasculares entre los bomberos. Estas explicaciones incluyen la exposición al humo y agentes químicos, esfuerzo físico irregular, el manejo de grandes equipos y materiales, el estrés térmico, el trabajo por turnos, una alta prevalencia de factores de riesgo cardiovasculares (obesidad, Tabaquismo, colesterol) y el estrés psicológicos. Además estas muertes se debieron a que el personal carece de la aptitud física adecuada para el trabajo que deben realizar, incluso los nuevos reclutas de bomberos tienen sobrepeso y una capacidad aeróbica de baja a normal.Esos problemas se agravan durante la permanencia de la carrera, porque más del 70% de los bomberos carecen de programas para fomentar la salud y el fitness, por lo que tienen una tolerancia al ejercicio inferior a lo esperado. La mayoría de los bomberos no realizan ejercicio regularmente ni se someten a exámenes médicos periódicos o a evaluaciones obligatorias de regreso al trabajo después de una enfermedad grave. Por otra parte, la investigación realizada han mostrado que entre los bomberos que tuvieron eventos fatales o eventos no fatales relacionados con las enfermedades coronarias en cumplimiento del deber, el 26%, habían previamente recibido un diagnóstico de enfermedad coronaria, enfermedad vascular periférica o enfermedad cerebrovascular y el resto tenia antecedente de tabaquismo, hipertensión, diabetes mellitus, obesidad. Tambien se descubrio que aumenta significativamente el riesgo de muerte por enfermedad coronaria durante la extinción de incendios, en comparación con funciones que no son urgentes, siendo el riesgo elevado significativamente durante el entrenamiento físico. Este hallazgo es coherente con las investigaciones que implicaba una actividad física intensa como factor desencadenante fuerte, especialmente entre las personas físicamente inactivas.
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