31/10/2012 / Por MARÍA BELÉN ETCHENIQUE: Además de trabajar en el cuartel central del distrito es médico y se disfraza de Hombre Araña para operar a los chicos. El lunes asistió a una joven que no podía salir de su casa de Villa Centenario.
Las agujas del reloj marcaban, rígidas, las seis de la mañana. Ingrid, de 18 años, estaba a punto de parir. No esperaba la llegada de su segundo hijo en un hospital, tampoco en una salita médica. Estaba atrapada en su casa en Villa Centenario, donde el agua alcanzaba el metro de altura. La tormenta que azotó a Capital Federal y el Gran Buenos Aires la obligó a dar a luz en circunstancias que no imaginaba, ni deseaba. Pero el auxilio de efectivos del cuartel de bomberos voluntarios de Lomas de Zamora posibilitó el nacimiento de Agustín, que pesó 2,950 kilos. Madre e hijo fueron sacados en una autobomba y luego trasladados al Hospital Gandulfo.
Entre el grupo de bomberos voluntarios que asistió a Ingrid estaba Mariano Ortega Soler, quien tuvo un papel protagónico en la llegada de Agustín. Fue presentado en canales de noticias como el héroe del día, como el único que posibilitó una buena noticia entre tanta pérdida por el temporal. Pero detrás de Mariano hay más aristas. Además de bombero voluntario, es médico y trabaja en el Servicio de Emergencias 107 del distrito. Eso no es todo y en el Hospital Gandulfo. Mariano no siempre es Mariano, también es El Hombre Araña.
En el quirófano, lleva el rostro enmascarado, viste de rojo y azul y sobre su pecho emerge una gran araña. Mariano reserva su doble identidad para ocasiones especiales: cuando hace cirugías infantiles. "Mi papá, también médico, decía que además de curar hay que cuidar. Con el traje los nenes se sienten más relajados. Antes de la operación, se van a dormir contentos y se despiertan de la misma forma", describe el vecino de 35 años, que cuando era chico le pidió a su mamá un traje de bombero, que se ponía cada vez que oía pasar la autobomba por la calle de su casa.
Mariano, El Hombre Araña, partero en medio del diluvio, bombero voluntario o simplemente el novio de Verónica -con quien se casará en los días próximos días- establece un pacto secreto con sus pacientes. "Les digo que soy El Hombre Araña, les pido que no lo comenten. Al verme entrar al quirófano, les brillan los ojos. Y los chicos juegan a ser mis compañeros: 'yo te acompaño, soy Ben 10', contestan".
Con un ambo devenido en traje de superhéroe, Mariano se ganó el cariño de sus colegas que lo desafían a vestirse de Barbie al momento de operar a una nena. Él se ríe y explica que no abandonará el personaje porque "El Hombre Araña jamás perderá vigencia".
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Fuente: http://lomasdezamora.clarin.com/ciudad/increible-histoira-bombero-p...
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