OPCIONES TÁCTICAS DE ATAQUE
PARA LA EXTINCIÓN DE INCENDIOS ESTRUCTURALES
ARTICULO TECNICO DE JUAN CARLOS CAMPAÑA LOPEZ
Suboficial Jefe de Área del Cuerpo de Bomberos Madrid
1. INTRODUCCIÓN Y JUSTIFICACIÓN.
Durante muchos años existió cierta resistencia de los Mandos de los Servicios de Bomberos a sustituir o complementar su instinto y experiencia, por la aplicación de un sistema unificado y estructurado para la evaluación y toma de decisiones en intervención.
Este enfoque basado en vivencias y en normas tradicionales no escritas, provocaba que, en intervenciones de envergadura, apareciesen importantes problemas de organización, eficacia, gestión y seguridad.
Hoy en día nos enfrentamos a escenarios de incendios estructurales diferentes a los de antaño.
Escenarios extremadamente dinámicos, con una rápida evolución y un gran desprendimiento de energía. Los momentos iniciales de cualquiera de estas intervenciones están marcados por la confusión, la incertidumbre, la falta de información y el riesgo de rápida propagación que caracteriza a este tipo de situaciones. La toma de decisiones del Mando de primera respuesta se convierte en una tarea complicada y estresante, pero tremendamente decisiva para la evolución y resolución de la intervención.
Estos factores, unidos a un marco normativo laboral reglado y exigente, hacen necesario contar con una estructura mínima estándar y común para la resolución de las intervenciones, bajo parámetros de organización, seguridad y eficacia.
Así, las pautas básicas que deben guiar las funciones del Mando y la estructura unificada de las intervenciones a las que acuda cualquier Servicio de Bomberos, deberían estar definidas en documentos claros y oficiales (Procedimientos Operativos, Guías Operativas...), de obligado cumplimiento para todo el personal operativo.
El presente artíc*** pretende aportar una herramienta básica de ayuda y guía, para que el Jefe de Intervención (pero también el resto del personal a su cargo) pueda acometer de manera estructurada la evaluación, la elección de objetivos y la toma de decisiones tácticas, en esos difíciles momentos iniciales de la intervención.
Igualmente, puede servir como guía para la formación y entrenamiento de los Mandos y resto del personal operativo.
2. CONCEPTOS PREVIOS.
· Incendio estructural o en interior de edificaciones: Todo incendio que se desarrolla en el interior cualquier tipo de estructura o edificación, en sus diferentes tipologías, usos y cotas, con o sin manifestación al exterior, que tiene el potencial de propagarse tanto horizontal como verticalmente, afectando al contenido y/o al continente de la misma.
En este escenario es la propia estructura que contiene el incendio la que impide la disipación de los productos de la combustión a la atmósfera, a la vez que limita, en mayor o menor medida, la entrada de comburente para mezclarse y reaccionar con estos gases. La combinación de estos factores va a modificar sustancialmente la evolución del incendio y su curva de desarrollo, pudiendo desencadenar
fenómenos como Flashover, Backdraft o Inflamación de Gases de Incendio.
La norma ISO 13943 recoge el término "Incendio Confinado", definiendo este como aquel que tiene lugar y ha sido prendido dentro de una envolvente, entendiendo envolvente como un volumen definido por superficies limitantes, que pueden tener una o más aberturas. Por su parte, la norma NFPA 921 recoge el término "Incendio en recintos cerrados".
· Estrategia: "Patrón General de Actuación" que el Jefe de Intervención, basándose en la evaluación previa de la situación y de los recursos disponibles, elegirá para la consecución rápida, eficaz y segura de las prioridades u Objetivos Estratégicos Genéricos (OEGs):
· Seguridad de los intervinientes.
· Salvar vidas.
· Control de la propagación.
· Extinción del incendio.
· Control de efectos medioambientales.
Hay que tener en cuenta que estos OEGs nos marcan las prioridades genéricas para acometer, pero no necesariamente por ese orden. Así, todos sabemos que, como bomberos, nuestra prioridad será “Salvar vidas”, pero esto no tiene por qué ser lo primero que acometamos en una intervención por incendio estructural. Un mínimo control del incendio, o la posición adecuada de una primera línea de agua, salva más vidas que cualquier técnica de búsqueda y rescate.
Dependiendo de las características de la intervención, la Estrategia elegida podrá tener carácter Ofensivo o carácter Defensivo. La Estrategia se definirá al inicio de la intervención, pero se deberá ajustar en función de la evolución previsible de la misma. Aunque la intervención debe resolverse bajo los parámetros de una Estrategia general, puede ser necesario decidir el empleo de estrategias parciales en diferentes Sectores Geográficos de la misma.
· Estrategia Ofensiva: Se considera que la cantidad y/o capacidad de los recursos disponibles es suficiente para asumir y controlar con seguridad los riesgos que se presentan. El Jefe de Intervención decidirá acometer directamente:
* Respecto al OEG de "Salvar vidas": Búsqueda y rescate, evacuación y/o confinamiento de víctimas que se encuentren o pudiesen encontrarse en el Área de Riesgo Inmediato y colindantes, amenazadas o afectadas directamente por el
incendio.
* Respecto al OEG de "Control de Propagación y Extinción": Mitigar la evolución del incendio y sus consecuencias, actuando directamente sobre el origen del mismo, de manera rápida y contundente, teniendo en cuenta que esto también puede convertirse en uno de los principales medios para “salvar vidas”.
· Estrategia Defensiva: Se considera que la cantidad y/o capacidad de los recursos disponibles no es suficiente para asumir y controlar con seguridad los riesgos que se presentan; o bien estos son suficientes, pero los riesgos son inasumibles e incontrolables. El Jefe de Intervención decidirá acometer:
* Respecto al OEG de "Salvar vidas": Búsqueda y rescate, evacuación y/o confinamiento de víctimas que se encuentren o pudiesen encontrarse en áreas colindantes al Área de Riesgo Inmediato, amenazadas o afectadas indirectamente por el incendio y sus consecuencias, dado que no es posible
hacerlo en Área de Riesgo Inmediato.
* Respecto al OEG de "Control de Propagación y Extinción": Mitigar la evolución del incendio y sus consecuencias, centrándose inicialmente en evitar su propagación y extensión, mientras se intenta reducir la intensidad del foco principal del mismo, teniendo en cuenta que esto también puede convertirse en uno de los principales medios para “salvar vidas”.
· Plan de Acción Táctico (PAT): Es el "Conjunto de Acciones Tácticas" con objetivos concretos, ajustadas a Procedimientos Operativos, ejecutadas de forma secuencial y segura, que el Jefe de Intervención decide emplear para cumplir el Patrón Estratégico elegido (Ofensivo o Defensivo). El PAT debe ser flexible, adaptable a resultados y responder a: Qué, Quién, Cómo y Cuándo (QQCC).
· Tareas Operativas: Son cada una de las "Tareas Concretas" (el "Qué") que forman parte de Procedimientos Operativos, que se delegan para ser ejecutadas físicamente por los Equipos de Trabajo de una dotación (el "Quién") y que dan cumplimento al Plan de Acción Táctico. Siempre que sea posible, en función de la flexibilidad operativa a la que nos obliga la naturaleza cambiante de la
intervención, las Tareas Operativas deberían estar ajustadas a Maniobras regladas (el "Cómo").
· Equipación Básica para Intervención en Incendios Estructurales (EBIES): Equipación mínima e imprescindible que todo el personal actuante en un Incendio Estructural deberá portar de forma obligatoria, con independencia de las necesidades de la intervención, y que puede ser necesario complementar en función del tipo y características de la misma, en momentos específicos, por orden del Mando directo, o en función de la Tarea Operativa asignada. Cada Servicio de Bomberos debería determinar los elementos que componen esta equipación para su personal.
· Zonificación de la Intervención: División geográfica de la intervención, según el nivel de riesgo existente y la naturaleza de las operaciones a desarrollar. En toda intervención se deben establecer tres zonas: Caliente, Templada y Fría.
· Área de Riesgo Inmediato (ARI): Área central dentro de la Zona Caliente, donde se localiza físicamente (de forma estática o dinámica) el origen y propagación inmediata del incidente causante de la intervención. Dentro del ARI únicamente se encontrarán aquellos Equipos de Trabajo que deban aplicar directamente las Tareas Operativas, maniobras y técnicas tendentes al control de su progresión, reducción de sus consecuencias y/o eliminación final, y siempre con conocimiento de su Mando directo. Es el "Área Caliente" dentro de la Zona Caliente.
Dependiendo de las características, tipo y magnitud del incidente causante, en una intervención pueden existir más de un ARI:
* En una intervención por accidente de tráfico, el ARI será cada uno de los vehículos sobre los que los Equipos aplicaran directamente las maniobras de estabilización, de acceso y de liberación para rescatar personas atrapadas.
* En una intervención por MMPP, el ARI será el vehíc***, maquinaria, instalación, vertido, etc., sobre el que los Equipos deben empezar a aplicar directamente las maniobras de contención, neutralización, etc. o En una intervención por Incendio Estructural, el ARI será la planta, vivienda, recinto, estructura, instalación, etc., donde se localiza físicamente el origen del incendio y de su propagación, y donde los
Equipos deben empezar a aplicar directamente las maniobras de control de propagación, para la extinción final.
· Área de Colapso: Es el área dentro de la Zona Caliente, exterior y perimetral al ARI de una estructura inestable, que previsiblemente puede verse afectada por la caída de los escombros y restos desprendidos de un posible colapso estructural parcial o total. Como norma general la dimensión del Área de Colapso será de vez y media a dos veces la altura del elemento estructural con riesgo de colapso. En este Área no debe haber ningún equipo operativo.
3. INTRODUCCIÓN AL MODELO CUADRANGULAR.
Hasta hace poco el Jefe Intervención, siguiendo el Patrón Estratégico elegido, solo contaba con dos tipos de Opciones Tácticas básicas para acometer el OEG de "Control de Propagación y Extinción" de un incendio estructural. De esta manera, se implementaría un Ataque Defensivo Exterior cuando el Ataque Ofensivo Interior no era posible, abandonando el edificio y evitando la propagación a otras estructuras.
A día de hoy, las numerosas y recientes investigaciones internacionales nos aportan la base científica, el conocimiento y la experiencia suficientes como para añadir a nuestro arsenal táctico nuevas posibilidades operativas, que nos ofrecen mayor versatilidad, a la vez que aumentan los parámetros de seguridad y eficiencia que podemos ofrecer.
Fruto de este volumen de investigación, en el año 2014 se publica de la mano de la Escuela Nacional de Bomberos Holandeses, un documento interno en el que se desarrolla el concepto de “Modelo Cuadrangular para la Extinción de Incendios Estructurales”.
En este documento se añaden a las dos Opciones Tácticas tradicionales, otras dos más, con la pretensión de servir o ayudar al Jefe de Intervención en el diseño del Plan de Acción Táctico y la toma de decisiones en los momentos iniciales de la intervención.
4. INTEGRACIÓN EN EL SISTEMA DE MANDO Y CONTROL.
La introducción del Modelo Cuadrangular obliga a poner el máximo énfasis en determinar cuál es el/los objetivo/s concreto/s de las Acciones Tácticas de control de propagación y extinción. El/los Mando/s deben centrar su esfuerzo en la evaluación, gestión y organización de la intervención, desde una posición exterior al ARI, evitando la "micro-gestión" de las Tareas Operativas delegadas a sus Equipos de Trabajo.
Basándose en la información recopilada durante la evaluación inicial de la escena, el Modelo Cuadrangular proporciona una herramienta de ayuda al Jefe de Intervención, para decidir qué cuadrante (qué Opción Táctica de Ataque) es el más adecuado a cada situación, en función del objetivo que se pretenda conseguir.
Para que el Jefe de Intervención pueda elegir un Cuadrante Táctico de Ataque, y su objetivo, debe pararse, "gastar/ganar" unos minutos y evaluar los siguientes factores que siempre se interrelacionan en cualquier intervención:
Sobre la base de la información recopilada (víctimas, incendio y estructura), el Mando puede evaluar si los riesgos son asumibles y si los recursos disponibles son suficientes para reducir o eliminar estos y qué capacidad tienen para aplicar suficiente agua de manera correcta y en lugar adecuado.
La evaluación en conjunto de estos factores es de vital importancia para que el Jefe de Intervención se cree una imagen de lo que está sucediendo, pueda intuir hacia dónde evolucionará la situación a corto plazo y decida el Patrón Estratégico adecuado y qué Cuadrante Táctico inicial (o qué combinación de cuadrantes) es el más apropiado y seguro para llevar al incendio bajo control. Así, podría ser aconsejable elegir primero un cuadrante Defensivo, hasta tener disponible suficiente capacidad operativa (agente extintor, personal, equipos...) para, a continuación, valorar la posibilidad de cambiar a un cuadrante Ofensivo con garantías.
Cuando hay, o se intuye que puede haber, personas dentro de la estructura, la primera decisión que se debe tomar es si se debe iniciar una Acción Táctica de rescate, o si es más efectivo comenzar con una Acción Táctica de Ataque al incendio. Esta decisión estará determinada, en parte, por la ubicación de la/s víctima/s en relación con el origen del incendio y la intensidad de este en relación con la capacidad extintora disponible.
5. DESARROLLO DEL MODELO CUADRANGULAR.
El Modelo Cuadrangular es, ante todo, un modelo de pensamiento. Las líneas entre los cuadrantes simbolizan la necesidad de reconsiderar un cambio de cuadrante durante las operaciones de extinción, en función de la evolución de la situación.
Foto 1 - Ejemplo de posible situación Defensiva Exterior.
Foto 2 - Ejemplo de posible situación Defensiva Interior.
Foto 3 - Ejemplo de posible situación Ofensiva Exterior.
Foto 4 - Ejemplo de posible situación Ofensiva Interior.
6. APLICACIÓN EN LA INTERVENCIÓN.
Una de las funciones primordiales del Jefe de Intervención es el "Control de la evolución del incidente". Así, la información relativa a la evolución del siniestro (positiva o negativa) permitirá al Mando decidir sobre los cambios que pueda considerar necesarios. El reto es tratar de ir siempre por delante del incendio, anticipándose a los nuevos requerimientos.
Para ello, es fundamental que todo el personal operativo, no solamente los Mandos, entiendan el Modelo Cuadrangular, estén habituados a las acciones de control, a la evaluación de condiciones y al uso correcto de las comunicaciones, para que la información fluya de manera ágil, sencilla, sistemática y siguiendo de forma rigurosa la cadena de jerárquica, hasta llegar al Puesto de Mando.
Una de las características del Plan de Acción Táctico, debe ser su flexibilidad. El Mando debe verificar constantemente los factores cambiantes y comprobar que el cuadrante aplicado (o combinación de cuadrantes) es el apropiado para cumplir con los objetivos planteados.
Por tanto, una vez iniciadas las acciones del Plan de Acción Táctico inicial, se debe realizar un control continuo sobre los resultados que se van obteniendo y, en caso necesario, poder tomar medidas correctoras.
Así, cuando un incendio evoluciona negativamente, los riesgos estructurales aumentan y disminuyen las posibilidades de supervivencia para cualquier víctima. Es posible que la capacidad de Ataque Ofensivo inicial, sea insuficiente para la velocidad de evolución del incendio. Como resultado, se debería cambiar a un cuadrante Defensivo. Del mismo modo, cuando la capacidad inicial no era adecuada, pero la evolución del incendio es positiva, el Mando podrá plantearse cambiar a un cuadrante Ofensivo. Estos cambios deben comunicarse claramente a todas las dotaciones para
que quede claro cuál/es son los nuevos objetivos.
Por otro lado, la experiencia nos dice que generalmente es posible/adecuado utilizar una combinación de cuadrantes en diferentes partes o Sectores Geográficos del mismo incendio. Por ejemplo, un incendio extenso en un edificio industrial, puede obligar a un Ataque Exterior Defensivo para evitar la propagación a las estructuras adyacentes, mientras que, consideradas las condiciones de estabilidad estructural, dentro del edificio se puede ejecutar un Ataque Interior Defensivo para evitar que el incendio salga de la planta de origen. Del mismo modo, un incendio en un edificio residencial o de oficinas puede requerir la aplicación inicial de un Ataque Ofensivo Exterior, mientras se prepara el Ataque Ofensivo Interior.
La ejecución de cualquier cambio de cuadrante no será algo inmediato, sino que puede implicar la movilización y el cambio de ubicación de numerosos recursos humanos y materiales. Por ello el Mando deberá anticiparse y adoptar cuantas medidas previas al cambio considere necesarias, para que no se interrumpa en ningún momento el ataque al incendio.
JUAN CARLOS CAMPAÑA LOPEZ
Suboficial Jefe de Área del Cuerpo de Bomberos Madrid
Referente de los Bomberos de Madrid y de toda España, talvez uno de los oficiales mejor preparados y con mas formación dentro de la especialidad de extinción de incendios estructurales interiores. Especialista CFBT Internacional y fuente de consulta de instructores en muchos paises.
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OPCIONES TACTICAS.pdf
Bibliografía:
· CFBT-BE - http://www.cfbt-be.com/nl/publicaties/artikelen.
· http://www.cfbt-be.com/images/artikelen/artikel_37_ES.pdf
· Quadrant Model for Fighting Structure Fires - BRANDWEER
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