QUITO, Ecuador -- Al menos 500 bomberos y decenas de policías y militares laboraron durante casi tres horas para neutralizar un incendio que consumió el martes al menos tres bodegas en el norte de la ciudad portuaria de Guayaquil.
El flagelo no dejó víctimas civiles, pero media docena de bomberos quedaron con heridas menores o con síntomas de asfixia.
El jefe del cuerpo de bomberos de Guayaquil, Martín Cucalón, al frente de un operativo en el que actuaron unos 500 efectivos, declaró que "lamentablemente a los químicos es difícil neutralizarlos cuando se incendian". La situación se produjo en la zona conocida como vía Juan Tanca Marengo, que inicialmente era de carácter industrial, pero que ahora está rodeada de ciudadelas.
Mientras las llamas subían unos cincuenta metros en el cielo guayaquileño y una densa columna de humo se podía ver desde varios kilómetros de distancia, se producían nuevas explosiones al interior de la bodega como consecuencia de la combustión de los productos almacenados. Las llamas también contaminaron una bodega de juguetes y otra de productos para fabricar colchones, a las cuales consumieron totalmente.
Decenas de policías y militares acordonaron el área del incendio, que fue controlado en unas tres horas, para evitar mayores problemas.
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