Los funcionarios permanecieron desaparecidos por más de dos horas dentro del local comercial. La falta de equipos impidió que sus compañeros pudieran ubicarlos y salvarles la vida.
Carlos Jesús Gómez/ Ciudad Guayana
Dos funcionarios del Cuerpo de Bomberos Municipales de Caroní perecieron asfixiados durante la madrugada de este miércoles, mientras participaban en las labores de combate de un incendio ocurrido una tienda por departamentos conocida como Bazar Unión, ubicada en el centro cívico de Puerto Ordaz.
Los apagafuegos caídos en el cumplimiento de sus funciones fueron identificados como el sargento Joel Enrique Mendoza Soto, de 40 años de edad, y el cabo José Mauricio Gómez Cardona de 38, quienes producto del espeso humo y la pésima disposición de la mercancía dentro del local comercial, se perdieron dentro del mismo y se asfixiaron al acabárseles las bombonas de aire comprimido.
Impotentes
Se conoció que Joel Mendoza tuvo que utilizar su teléfono celular para comunicarse con el cuartel central ubicado en Unare y dar aviso a sus compañeros de que estaba atrapado junto a Gómez en el segundo piso del Bazar Unión (antiguo Tijerazo), zona que habían entrado a revisar.
Y es que los radios de comunicación de los Bomberos de Caroní se encuentran obsoletos y en la mayoría de los casos averiados, y suelen no emitir ni recibir señal en varias zonas de la ciudad o en espacios cerrados, lo que aparentemente le ocurrió a los apagafuegos hoy fallecidos, impidiéndoles solicitar auxilio de una manera más expedita.
“Tenemos que usar nuestros propios teléfonos celulares para comunicarnos, casi no hay radios, y los que tenemos son comprados por nosotros mismos, este sistema radial tiene más de 20 años de uso y no han instalado uno más moderno como por ejemplo el troncalizado”, comentó un bombero.
Aunado a esta dificultad, los compañeros de los dos efectivos atrapados dentro del local, tampoco pudieron hacer nada para ingresar a rescatarlos y así salvarles la vida, ya que no contaban con los equipos de protección respiratoria necesarios, adecuados y suficientes para efectuar esta operación.
Según versiones de testigos, los dos hombres reportaron que se encontraban en graves dificultades a las cuatro de la mañana, pero no fue sino hasta las pasadas las seis que pudieron ser ubicados muertos, y luego extraídos sus cadáveres en medio del dolor y la impotencia de decenas de bomberos.
Con Joel Mendoza y Mauricio Gómez suman tres los miembros del Cuerpo de Bomberos de Caroní que mueren en servicio en lo que va de 2010, ya que en enero pereció el funcionario Jonathan González, al caer de una altura de más de diez metros durante un procedimiento de incendio.
Abandonados
El teniente Oswaldo Muñoz, con 29 años de servicio en la institución bomberil, lamentó la trágica pérdida de dos de sus compañeros, y subrayó que si el órgano de atención de emergencias tuviera equipos de protección respiratoria modernos, que envían señales auditivas y luminosas en caso de que un funcionario se pierda, esto no habría sucedido.
Además, los apagafuegos municipales también adolecen del instrumento conocido como cámara térmica, que permite ubicar los focos de incendio y cuerpos humanos entre la oscuridad del humo de forma rápida y confiable.
Pero Muñoz aclaró que estas no son las únicas carencias del Cuerpo de Bomberos de Caroní, ya que sus problemas van mucho más allá.
“La situación actual es precaria, nosotros como bomberos no cumplimos con los estándares internacionales en cuanto a equipamiento y seguridad en las operaciones, y además nuestra realidad económica es pírrica, donde como estos dos compañeros, podemos perder la vida por un salario que en muchos casos no llega a los dos mil bolívares fuertes”.
“Cual es el valor que le damos a nosotros a nuestras familias cuando vemos que podemos morir de una forma tan miserable, porque los muchachos tuvieron que llamar a pedir auxilio desde sus celulares ya que los radios obsoletos no servían”.
“Cuando los bomberos que estaban afuera reciben la información de que los compañeros están perdidos en condiciones críticas, no tienen como ayudarlos porque carecen de los equipos adecuados para hacer un rescate de este tipo”, aseveró Muñoz.
¨Hasta cuando?
El declarante se preguntó por cuanto tiempo más se mantendrá esta grave crisis en los Bomberos de Caroní, ya que el alcalde José Ramón López en sus dos años de administración no ha invertido ni un bolívar en equipamiento o capacitación para estos servidores públicos.
De hecho, la primera vez que el burgomaestre visitó una sede bomberil fue durante el velorio del bombero que falleció en enero, y desde entonces no lo ha vuelto a hacer. Los presupuestos de la Alcaldía Socialista Bolivariana de Caroní de 2009 y 2010 no incluyeron ningún proyecto de dotación para los apagafuegos de Ciudad Guayana, el de 2011 al parecer tampoco.
“¨Hasta cuando esta situación va a seguir así? Esto no debió haber pasado, si hubiésemos tenido los equipos los habríamos podido salvar”, reclamó Oswaldo Muñoz.
¨Hasta cuando el Cuerpo de Bomberos de Ciudad Guayana debe estar soportando esta agonía? Que lo confirme quien tenga que confirmarlo, que vengan a nuestras estaciones y vean cómo están equipadas nuestras ambulancias, qué tienen nuestros carros, cómo y cada cuanto se nos dota de uniformes, cómo come el bombero, que no tenemos planes de vivienda ni de previsión social”, manifestó el teniente.
Llamado de alerta
Oswaldo Muñoz hizo un llamado a la colectividad guayanesa, en especial a los gremios y cámaras empresariales a que se solidaricen con el Cuerpo de Bomberos de Caroní ante su precario estado.
“Yo como uno de los más antiguos en la institución quiero que la gente sepa lo que está pasando, que la comunidad tome conciencia, porque cuando un bombero acude a un incendio o un rescate no está viendo el color político, si la gente es pobre o rica para ayudarla, a todos los atendemos por igual, con el mismo orgullo y dignidad”, apuntó.
Sin embargo, se preguntó a qué costo estos funcionarios corren tantos peligros “¨Por qué un obrero o una secretaria gana más que un bombero, no es que no lo merezca, pero por qué nosotros exponemos nuestras vidas que se van y queda una familia desasistida y unos niños huérfanos por tan poco salario”.
“¨Hasta cuando tenemos que estar trabajando sin una póliza de HCM? Cuando logramos que nos atiendan en las clínicas es porque le pedimos el apoyo a sus dueños”, subrayó.
“Ya basta, yo digo que ya basta, nos hemos quedado en el tiempo, se ha triplicado la demanda de servicios, la ciudad ha crecido y nosotros seguimos siendo la misma cantidad de bomberos y con cada vez peores condiciones”, finalizó diciendo.
Sepelio
Los restos de Joel Mendoza, quien tenía 18 años al servicio de la ciudad y de Mauricio Gómez, quien contaba con 6 años de experiencia como bombero, están siendo velados desde anoche en la funeraria Profamilia de Puerto Ordaz, y se espera que antes del medio día de hoy sean trasladados al cuartel central Pedro Vargas de Unare, y luego al cementerio Jardines del Orinoco, donde en horas de la tarde serán sepultados.
CUADRO APARTE O DESPIECE
Ayuda mutua
Miembros de los departamentos de Control de Emergencia de Venalum, Bauxilum, Edelca y Alcasa, así como efectivos de la Policía del estado Bolívar, Patrulleros de Caroní, Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, y personal de Protección Civil y Emergencias Bolívar 171 acudieron al lugar del siniestro para brindar apoyo.
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