El 30 marzo de 2017, una vivienda de tres pisos ubicada en el barrio Ciudad Córdoba del oriente de Cali fue consumida por las llamas, en una conflagración que inició en la madrugada y no dio oportunidad a sus habitantes para salir del lugar.
En la casa vivían ocho personas en total, pero según el reporte de ese momento emitido por los bomberos, la densa capa de humo provocada por el incendio y las llamas que se habían iniciado en la fachada impidieron que los residentes abrieran la puerta para salvarse.
Todos los que se encontraban al interior de la vivienda resultaron afectados por la conflagración. Los bomberos lograron rescatar a cuatro menores de edad que presentaron quemaduras en el tracto respiratorio a causa de la inhalación de humo, un hombre de 57 años con quemaduras en el rostro y el torso, una mujer de 22 años con afecciones respiratorias, un hombre de 31 años con quemaduras en el miembro superior izquierdo y una anciana de 70 años de edad.
De acuerdo con el noticiero 90 Minutos del Valle del Cauca, fueron necesarios más de 20 bomberos, tres máquinas extintoras y un carrotanque para contener las llamas. Según el informativo, una de las habitantes de la casa señaló que el hecho pudo deberse a una acción criminal de prestamistas gota a gota que la habían amenazado debido a la costosa deuda que tenía en mora con ellos. Otros aseguran que pudo ser producto de un corto circuito.
La acción de los bomberos logró rescatar con vida a todos los residentes, aunque dos tuvieron graves afectaciones por la inhalación y las llamas. Reynel Blandón Ruiz fue uno de los rescatados por el cuerpo de emergencias, quien le contó al diario El Tiempo lo que fue de su vida después de superar el fuego.
Según contó a ese periódico, él vivía con su esposa, dos hijos y su suegro en el primer piso de la vivienda, donde también tenía un local de venta de accesorios para motos. Se acostó sobre la 1:00 de la madrugada y antes de caer en sueño fue alertado por los vecinos de que la vivienda se estaba incendiando.
Trató de abrir la reja blanca exterior de la casa para salvar a su familia, mientras otras personas corrían con artículos húmedos para protegerse, pero las llamas habían calentado tanto el metal y el candado que se lastimó las manos sin lograr abrir la única puerta de salida.
El periodista Miguel Ángel Espinosa contó que Reynel se refugió con su familia y sus hijos debajo de la cama para resguardarse del fuego y, en medio de la impotencia, golpeó su cabeza con el suelo. Su esposa, “tranquila” previó lo peor y agradeció la vida que habían tenido.
Mientras contaban los minutos para que el fuego alcanzara la habitación, el cuerpo de bomberos irrumpió y rescató a los cuatro miembros de la familia. La mujer y los menores presentaron quemaduras en la tráquea por la inhalación de humo, mientras que él tuvo quemaduras en la espalda. Su suegro fue una de las víctimas graves de la conflagración con mayores afectaciones.
El cuerpo de bomberos lo invitó meses después a la conmemoración del día nacional de esa profesión, que permitió afianzar la amistad que habían construido tras el rescate. La atención posterior al incendio y tras el evento, Reynel decidió ser parte de ese equipo y ayudar a que más personas, como él, pudieran tener una segunda oportunidad de vida.
Desde hace poco más de dos años es bombero en Cali y ha atendido emergencias como la del huracán Iota que devastó Providencia en noviembre de 2020. Aún se viene a su memoria el recuerdo del incendio, pero se deshace de esa remembranza remota para atender a quienes lo requieren.
FUENTE: INFOBAE
¡Tienes que ser miembro de LA HERMANDAD DE BOMBEROS para agregar comentarios!
Únete a LA HERMANDAD DE BOMBEROS