Al menos 26 muertos y una decena de heridos dejó el incendio de ayer en un centro de rehabilitación para drogadictos y alcohólicos en el popular distrito limeño de San Juan de Lurigancho (este). “Hasta el momento tenemos una información de 22 fallecidos en el sitio” y otros cuatro en hospitales, para un total de 26 muertos, afirmó el ministro de Salud, Alberto Tejada.
Por su parte, un funcionario del ministerio de Salud, Javier Correa, explicó que varios de los heridos, que rondarían la decena, “están muy graves”.
La primera vicepresidenta de la República, Marisol Espinoza, encargada del despacho presidencial en ausencia del presidente Ollanta Humala (de viaje oficial a Suiza), expresó sus “condolencias a los familiares de las personas que han fallecido en este centro de rehabilitación”.
El siniestro en el centro de rehabilitación Cristo es amor, se produjo “por la quema de un colchón, y el fuego se extendió sin que ninguna persona pudiera apagarlo”, dijo Antonio Zavala, comandante general del cuerpo de bomberos.
Zavala agregó que las muertes fueron por asfixia, ya que las puertas de hierro del centro estaban cerradas y los jóvenes no lograron escapar.
Familiares de los internos llegaron al conocer la emergencia y protagonizaron dramáticas escenas de dolor al ver cuerpos de víctimas regados por el suelo, en donde fueron depositados por los equipos de rescate.
El Ministerio Público informó que el centro albergaba unos 80 internos y que la quema del colchón se habría producido por una pelea entre internos en el primer piso.
Consultadas sobre si el centro es legal, las autoridades se limitaron a afirmar que “aparentemente, no es oficial”.
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