Relato de un sobreviviente de la plataforma Deepwater Horizont cuenta como fue el rescate

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Un Sobreviviente del equipo de perforacion del Deepwater Horizont cuenta como pudo escapar de la plataforma durante las explosiones

Stephen Davis cuenta cómo fue arrojado contra una pared por la explosión y como lo mantuvieron en el barco de trabajo 40 horas tras el rescate

• Suzanne Goldenberg , , Corresponsal del medio ambiente en EE.UU.
• guardian.co.uk , Jueves 20 de mayo 2010 15.47 H. Esp

El equipo de perforación de "Deepwater Hotizont" se incendia la semana pasada.

En la actualidad hay 1.000 personas involucradas en los esfuerzos para detener fugas de petróleo de la plataforma. Foto: Gerald Herbert / AP

Stephen Davis no puede desterrar de su memoria aquella noche de caos a bordo del Deepwater Horizont : la sensación de ser arrojado contra una pared por una explosión de grandes proporciones, el y la lucha desesperada en una cubierta iluminada sólo por los reflejos de una pila enorme de llamas, la mirada de los hombres antes de saltar desde los 18 metros (60 pies) al agua.

"Usted podia saborear el humo, que dejaba un gusto espantoso a petroleo en la boca," dijo. "Era difícil respirar. El oxígeno era arrastrado fuera de la estructura.

"Entonces, de repente - boom acaba. Fue la explosión más grande que he oído en mi vida."

Davis fue arrojado a 5 metros contra una pared.

"El aparejo entero vibraba y temblaba", dijo. "Es como si fuese directamente al infierno."

Un mes después de la explosión del 20 de abril en la plataforma de perforación costa afuera, se veia la verdadera escala de la destrucción ambiental y económica causada por un chorro de aceite y en el Golfo de México aún tiene terminar de desarrollarse por completo.

Los científicos no han establecido aún una estimación precisa de la cantidad de petróleo y gas arrojado en el Golfo desde el géiser en el fondo del océano, o determinar a futuro.

Stephen Davis sobreviviente de la explosión Fotografía: guardian.co.ukde la plataforma petrolera Deepwater Horizont.

Manchas de crudo alcanzaron los pantanos de Plaquemines, Luisiana esta semana y la administración Obama admitió que el petróleo se había enredado en la poderosa corriente, con la que podría llegar a los arrecifes de coral de los Cayos de la Florida.

Una vez que llega adonde esta ahora, el petróleo podría viajar tan lejos como México o Cuba, dijo al Congreso Frank Müller-Karger, un oceanógrafo de la Universidad del Sur de la Florida.

Para Davis, los acontecimientos de esa noche, cuando la plataforma explotó matando a 11 personas de la tripulación de un total de 126, fue sólo el comienzo de su calvario. Él dice que él y otros supervivientes iban a pasarian las próximos 40 horas de forma aislada - prohibido llamar a sus familias - mientras creen que los propietarios de Transocean hablaban con sus abogados, preparado sus defensas legales.

Diecisiete miembros de la tripulación resultaron gravemente heridos en el incidente.

Para Barack Obama, cuyos funcionarios están obligados a rendir cuentas de su supervisión de la perforación costa afuera en las audiencias del Congreso esta semana, el desastre podría ser el acontecimiento decisivo de su presidencia.

Para las empresas implicadas en el desastre - BP , el pozo propietario, Transocean, el dueño de equipo de perforación, y los subcontratistas de Halliburton y Cameron - esa noche era sólo el comienzo de lo que los juristas predicen será una de las mas complicadas y mas largas batallas legales de los EE.UU. que se hallan visto alguna vez.

"Este será uno de los mayores agravios probablemente en la historia de los Estados Unidos ", dijo Anthony Buzbee, un abogado de Houston que representa a Davis y nueve supervivientes que buscan $ 5,5 millones (£ 3,7 millones) cada uno por perjuicios de Transocean y otras empresas."En estos casos pasa muchos, muchos años." Él dijo que estaba preparando acciones judiciales contra otras dos empresas que suministran equipos a la plataforma.

El día 20 de abril había comenzado como cualquier otro para Davis, un nativo de 36 años de edad, de San Antonio, Texas. Pasó la mayor parte de su turno de 12 horas en el centro de la plataforma, la plataforma transportadora de soldadura para la prevencion de reventones (BOP).

Los investigadores ven el fracaso de ese dispositivo de seguridad, que descansa sobre el fondo del océano, como una de las causas de la catástrofe. Como Davis se fue con sobreturno, oyó decir a un ingeniero que iba a tratar de aliviar la presión sobre la balanza de pagos.

Davis comio su cena, llamó por teléfono a su novia y su hijo, se entreno en el gimnasio y regresó a su cuartel general en el nivel inferior de la plataforma.

Durante todo ese tiempo - alrededor de tres horas - escuchó silbidos fuertes como ingenieros trabajando en la construccion para reducir la presión desde el fondo del océano. Más tarde, esto le pareceria curioso, como aliviar la presión se consiguia normalmente con rapidez.

Había estado en la cama viendo la televisión durante unos 15 minutos cuando oyó la primera explosión.

Al principio pensó que desde una grúa o pluma podría haber caído un trozo de tubería de revestimiento. A continuación, la plataforma comenzó a temblar y las luces se apagaron.

Se puso un chaleco salvavidas además de sus pantalones cortos y camiseta, agarró sus zapatos de tenis y corrió hacia el pasillo.

Davis ha estado trabajando en plataformas en alta mar durante siete años, pero sólo había estado en el "Deepwater Horizont" cuatro días. "Mi zona de comodidad era realmente pequeña", dijo. Él había hecho parte del camino por las escaleras hacia los botes salvavidas en la cubierta media cuando las paredes se derrumbaron. Davis encontró otra escalera.

En cubierta, los trabajadores gritaban patinandose sobre el petroleo, en busca de sus botes salvavidas designados. Las reservas de combustible de los helicópteros y el diesel se incendiaron y explotaron.

"La gente estaba en pánico", dijo. "Ellos te miraban y estaban por saltar al agua. Se podia entender por qué si uno miraba atras y veia todas esas explosiones, podia pensar que se estaba por quemar ya sea alli arriba o si saltaba ."

Fue una caída de 18 metros al agua y el bote fue sobrecargado, pero el barco no zozobro y su piloto los guio a salvo a los buques de suministro de la plataforma, el Bankston Damon. Vio cómo el horizonte en aguas profundas se incendiaba allí.

Según los cálculos de Davis, se tomó 12-15 minutos para llegar desde la plataforma hasta el barco de trabajo, pero tendrían que pasar otros 36-40 horas antes de que pudieran regresar a la costa - a pesar de que había docenas de barcos en la zona y la Guardia Costera transportaba por helicópteros a los más gravemente heridos al hospital.

Algunos de los hombres estaban claramente furiosos, mientras que otros, como Davis, no sentian nada. Él dice que se les negó el acceso a un teléfono satelital a bordo o la radio para llamar a sus familias.

Cuando el barco finalmente se movió, no se dirigio a la cabezera de tierra directamente, deteniéndose en dos plataformas más para recoger o dejar ingenieros y el equipo de guardacostas antes de llegar a Port Fourchon, Luisiana.

La compañía estaba lista para los hombres entonces, con baños portátiles y se los alineaban en el muelle para las pruebas de drogas. Los hombres fueron cargados en autobuses, se les dio un cambio de ropa y cajas con bocadillos, y los llevaron a un hotel en Kenner, Luisiana, donde finalmente se reunieron con sus familias.

Los abogados dicen que el aislamiento era voluntario, y que Transocean estaba tratando de llevar a los hombres hacia abajo de manera que firmaran las declaraciones que negaban que habían sido heridos o que habían presenciado la explosión que destruyó la plataforma petrolera.

"A estos hombres se les dicia que tenian que firmar estas declaraciones o no podrian ir a casa", dijo Buzbee. "Creo que es bastante cruel, pero no estoy sorprendido."

Davis había estado despierto sin parar durante unas 50 horas a esta altura. Firmó. Buzbee dice que al igual que la mayoría de los hombres.

Es improbable para limitar las demandas contra las empresas implicadas en el desastre. Además de los sobrevivientes, Buzbee representa a más de 100 criadores de ostras, pescadores y empacadores de productos del mar que buscan se responda a sus daños económicos.

"Cualquier persona cuyo sustento dependa del agua va a tener algún tipo de daño", dijo. Docenas de otros abogados también se hicieron cargo de los casos.

Para Davis, sin embargo, todavía es demasiado pronto para pensar en su próximo paso. ¿Va a poner un pie en una plataforma de nuevo?"Por ahora, estoy como que no siento nada"

Fuente: http://www.guardian.co.uk

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