30 de septiembre de 2010
La figura del bombero de Madrid se extingue sin remedio. Es la crónica de una muerte anunciada. En diversas ocasiones nos corresponde prestar la humanitaria tarea de salvar de una muerte horrible al prójimo, nos pagan por esto, es nuestra obligación. Ser exigentes y no bajar la guardia. Siempre hemos sido así, aún mantenemos el alma de matafuego, pero es hora de demostrarlo entre todos.
Respeto implica compromiso ...ser exigentes con nosotros mismos y no bajar la guardia magnifica nuestro compromiso con el pueblo.
Todos y cada uno de los bomberos tenemos que exigir ser mejores profesionales y prestar un servicio de calidad a nuestro pueblo, a los madrileños, a nuestra gente, nuestros vecinos, amigos y familiares.
En lo que se refiere a la organización de nuestro servicio, no se ha dado paso alguno, resultando un servicio falto de cohesión y desordenado. En ocasiones se ha intentado, pero, la falta de presupuesto, poca credibilidad política y en definitiva el abandono de las vías profesionales, lo que tanto tiempo costó construir en épocas pasadas, se ha separado drásticamente del sentido común
Se están perdiendo muchas cosas, muchos valores que se consolidaron con el paso de muchos años de esfuerzo, de ilusión; las competiciones deportivas y de maniobras entre parques, la ¿Sociedad Benéfica?, ¿la escuela? Próximamente La Paloma, San Juan de Dios...

¿A QUIEN LE IMPORTA?




"Si el servicio de Extinción de incendios de Madrid llega algún día a entrar en las vías de orden, regularidad y organización, la capital de España realmente contará con de un servicio profesional de bomberos"

Isidoro Delgado y Vargas (1909)


Video Subido desde You Tube perteneciente a matafuego