"VEO GENTE MUERTA. ES NORMAL Y MÁS GENTE DEBERÍA HABLAR DE ELLO" - ARTICULO DE "THE GUARDIAN"

[CREADOR DE LA RED]

Fotografía: David Jones / PA Rob Norman Oficial de bomberos, cuerpo de bomberos de West Midlands

Veo a gente muerta. Es normal y más gente debería hablar de ello

Los flashbacks y recuerdos intrusivos son parte de lidiar con el trauma. Más de nosotros en los servicios de emergencia debe ser cómodo hablando de la salud mental

Rob Norman fue uno de los bomberos que trabajaron para recuperar los cuerpos de sus compañeros caídos después del fatal incendio  en Atherstone-on-Stour de 2007.

Sábado 30 de enero 2016

Este será mi 17mo año en el servicio de bomberos y rescate. En el curso de mis funciones he respondido a una serie de incidentes, incluyendo accidentes accidentes de autopistas, trenes y aviones, y el mortal incendio en Atherstone-on-Stour de 2007, donde cuatro de mis compañeros perdieron la vida.

Hemos trabajado durante días para recuperar los cuerpos de nuestros compañeros caídos en una estructura insegura, todavía en proceso de colapso. Mucho se podría escribir solo sobre el impacto mental de este incidente

Fue durante la sesión informativa del incidente crítico que siguió al incendio en Atherstone-on-Stour que me enteré de los pensamientos intrusivos. Mi servicio había contratado un consejero para discutir el incidente con todos los que habían estado allí. Explicó que el cerebro no es capaz de procesar incidentes traumáticos en su forma habitual. En lugar de ello, accede al azar a piezas de sus recuerdos en una etapa posterior, que puede resultar en memorias o recuerdos intrusivos. Se me informó que esto era normal, y que lejos de ser una indicación de que mi mente estaba fuera de control, en realidad fue esencial para mi salud mental. 

Sé que nunca voy a olvidar que se me cuadro "atención" en la guardia de honor, formada por el personal de los servicios de emergencia en el lugar, y como las familias afligidas del difunto pasaban delante de sus seres queridos llevadolos solemnemente desde el edificio hasta los coches fúnebres de espera. Nunca olvidaré lo desgarrador que se sentía, y a pesar de que no conozco a ninguno de ellos en lo personal, eran parte de lo que a menudo nos referimos como "familia 999". "Mi familia 999". Estos son mis pensamientos conscientes, para tiempos de reflexión en silencio; no se limitan y llegan sin invitación, causando disrrupción, a diferencia de mis recuerdos intrusivos.

A veces veo gente muerta. Es perfectamente normal y más gente debería hablar de ello. Me dijeron que los recuerdos de incidentes específicos se vuelven menos frecuentes a medida que la mente pone las piezas juntas y los archivos se alejan. También me dijeron que si no lo hacen, o si empiezan a interferir con la vida cotidiana, podría valer la pena buscar ayuda.

Mis experiencias en los últimos 17 años me han cambiado. Las cosas que he visto, oído y sentido en ese momento me han dejado con nuevos pensamientos acerca de la vida, la muerte y todo lo demás. Mientras que yo personalmente no siento que tengo un problema de salud mental, tal vez sin apoyo puedo haber desarrollado una. Esa posibilidad existe para todos de nosotros.

Como parte de su programa de luz azul para mejorar la salud mental del personal de servicios de emergencia, la organización benéfica MIND realizó una encuesta sobre 3.627 trabajadores - 87,5% de los cuales dijeron que habían experimentado estrés, bajo estado de ánimo, o mala salud mental.

El apoyo ofrecido por mi servicio después de este incidente ha quedado conmigo, y estoy agradecido por ello. Habiendo sido educado en la reacción natural de mi mente después de un incidente traumático, estoy muy feliz de hablar de ello, y esto es clave. Pero una reciente encuesta de YouGov revela que casi un tercio de nosotros se siente incómodo hablando de la salud mental. Y el 71% del personal de los servicios de emergencia en respuesta a la encuesta de MIND sintió que su organización no se animan a hablar acerca de la salud mental. Como consecuencia de ello, muchas personas sufren en silencio, o recurren a otros mecanismos de supervivencia, como el alcohol.

Siempre habrá factores desencadenantes específicos para estos recuerdos recurrentes, como la de regresar a la escena de un incidente. Un ejemplo para mí es la muerte desgarradora de un padre y su hijo de tres años de edad. Habíamos sido llamados para ayudar en la búsqueda en un río después de que un barco había volcado. Dos niños fueron rescatados antes de llegar allí, y como llegué a la orilla del río, el cuerpo inerte de un tercer hijo estaba siendo sacado del agua y frenéticamente trabajado por los paramédicos. Mientras luchaba para comprender la escena delante de mí, esperaba desesperadamente algunos signos de vida. Pero no había ninguno.

Recuerdo estar ayudando a lanzar el bote de rescate en el agua poco profunda aguas abajo, y la lucha de mis compañeros de equipo por conseguir ir aguas arriba, pasando por debajo de un puente, ya que nuestro bote fue al lugar donde, más tarde, recuperamos el cuerpo del padre de los niños .

De vez en cuando conduzco sobre ese puente. A veces ni siquiera me doy cuenta de que lo he hecho, y mi día continúa de forma normal. Otros días me doy cuenta de la pequeña villa y me acerco, y veo al padre y al hijo, una vez más.

Como los recortes a los servicios de bomberos continúan, el número de bomberos están disminuyendo, es decir, aquellos que permanecen son propensos a estar expuestos a incidentes críticos con mayor frecuencia. Los servicios de emergencia de la nación deberían estar hablando de la salud mental. No estoy sugiriendo que todos los servicios de emergencia se aferremos a la cordura con nuestras uñas. Lejos de esto. Todo lo que experimento me recuerda lo que realmente importa en la vida: que en un abrir y cerrar de ojos, todo puede cambiar. Incluso con la educación, los recuerdos intrusivos te encontraran desprevenido. Fui recientemente a una tienda de café con mi esposa, y mientras sacaba su bufanda alrededor de su cuello, mi mente saltó de nuevo a un hombre de mediana edad que se había quitado la vida. Él se había ahorcado de un puente del canal, usando su bufanda, y había estado allí durante varias horas. Después de que lo recuperamos, la policía encontró una nota en el bolsillo, junto con un anillo de bodas de oro liso que hacía juego con el que él llevaba en su mano izquierda.

Comparti con mi esposa esto, y dije que acababa de tener un flashback a un incidente. Ella me preguntó si quería hablar de ello. No lo hice. Es sólo mi mente que trae cosas a la distancia. Entiendo esto.

Pero yo espero que al escribir esto, pueda animar a más gente a hablar acerca de la salud mental.

Todo el mundo debería unirse a las conversaciones acerca de la enfermedad mental, y ayudar a acabar con algunos de los conceptos erróneos que nos rodean.

La Luz Infoline azul, para el personal del servicio de emergencia, los voluntarios y sus familias, puede ser contactado en el 0300 303 5999. Ofrece apoyo confidencial y asesoramiento sobre la salud mental y el bienestar. En el Reino Unido, los samaritanos puede ser contactado al 116 123. En Estados Unidos, la Línea Nacional de Prevención del Suicidio es 1-800-273-8255. En Australia, el servicio  de apoyo en crisis linea gratuita es 13 11 14. 

THE GUARDIAN

[Ysrael Salinas]

Saludos colega, excelente artíc***. Considero que para comenzar a hablar de salud mental en los bomberos es necesario que reconozcamos estas situaciones traumáticas como procesos peligrosos psicolaborales de nuestra profesión, o lo que algunos llaman factores de riesgo psicosocial. En la medida que afrontemos el impacto psicológico que nos genera la atención de emergencias con lesionados graves o fallecidos como una condición que incide en nuestra salud ocupacional podremos generar acciones preventivas que disminuyan estos impactos en nuestra salud mental. Podremos crear estrategias psicológicas o mecanismos psicológicos que nos protejan, tal como hacemos al ingresar en áreas con humo que nos colocamos equipos de protección respiratoria. La Organización Mundial de la Salud habla de que el proceso salud-enfermedad abarca lo social, lo biológico y tambien lo psicológico. En el caso de nosotros los bomberos protegemos nuestro cuerpo, lo biológico, pero hemos dejado a un lado lo social y lo psicológico.