EL CANTO DE LAS SIRENAS
Sargento César Andrés Uzcátegui
Para los servicios de emergencias, en especial para los Cuerpos de Bomberos hay una manera muy peculiar de prepararse para acudir a la atención de un evento extraordinario como lo son las emergencias; y es a través del sonido repentino conocido como la sirena o alarma, es la forma histórica que se usa hasta la actualidad por la cual empieza la acción propia del bombero y su servicio a la comunidad, sabiendo este absolutamente nada de lo que pueda esperarle en el lugar de donde se generó el llamado de alarma, pero eso no importa, pues este solo sabe que está preparado para lo que pudiese ocurrir.
Una alarma es el último paso posible del proceso de mando que se produce ya en la fase de la emergencia, este paso se cumple con el uso de dispositivos de audio de una considerable potencia que pueda ser escuchado en un determinado lugar, en el caso de los Bomberos son muchas las formas de generar una alarma, pudiera mencionar desde una campana, hasta un sofisticado sistema integrado con sonidos afines al tipo de emergencia que se haya generado.
Al punto al que quiero llegar no es el de explicar lo que es una alarma o una sirena, lo que me motivo a escribir es la sensación que causa el sonido de estas, desde el momento en que se escucha por primera vez hasta llegar al lugar donde se generó el llamado de auxilio y todo me lleva a mis primeros años como Bombero, recuerdo cuando escuche mis primeras alarmas, digo mis primeras porque fueron esas precisamente las primeras veces en las que salí en un vehíc*** de emergencias a un evento inesperado, la sensación obviamente en términos sencillos no es fácil de explicar, son un montón de sentimientos acompañados de una reacción física/espontanea de la condición profesional que en ese momento yo poseía, hablo de la poca o ninguna experiencia. Es algo que a todos nos ocurre cuando somos novatos, al sonar la alarma solo pensamos en llegar primero que nuestros superiores o compañeros de mayor experiencia, para demostrarles por sobre todas las cosas esas ganas de estar allí al frente del peligro.
¿Que ocurre en realidad? Algunos expertos en la materia han querido adjudicar esa sensación a una liberación o producción excesiva de adrenalina, hormona que es segregada por las glándulas suprarrenales, al producirse causa algunos efectos como el aumento de la frecuencia cardíaca, contracción de los vasos sanguíneos, expansión de los conductos de aire, dilatación de las pupilas, relajación de los músculos, entre otros. Es lógico en el caso de los Bomberos, pues esta hormona se produce específicamente cuando el cerebro percibe una situación de peligro, en esos momentos extremos, un bombero tiene la opción casi única de luchar para cumplir la misión y es la adrenalina la que influye para mejorar el desempeño del bombero en la atención de las emergencias, claro esta que esta se activa con el sonido de las sirenas. Las sirenas mientras estén sonando promueven un estado de alerta que influye hasta en la visión. Esta sería la explicación científica a la sensación que causa el CANTO DE LAS SIRENAS.
Hay una explicación desde el punto de vista sentimental, obviamente la adrenalina se involucra como un factor determinante pero por sobre todas las cosas esta la motivación y el amor a la profesión del bombero, si no existe esa conexión sentimental que nos motiva a luchar para lograr nuestras metas, quien no posea un amor por la profesión y no experimente una reacción ante el sonido de la sirena, simplemente es un peligro dentro de la institución porque al no producir adrenalina, su mente y su cuerpo no está preparado para lidiar con el estrés que causa el momento de la emergencia y fácilmente puede ser víctima de la propia emergencia. En nuestro mundo, es más difícil lidiar con aquellos que no sienten suya esta hermosa profesión que lidiar con los gajes propios del oficio. Estas personas que no experimentan el sentimiento bomberil por llamarlo de algún modo están más expuestas a sufrir accidentes en los procedimientos, incluso hasta en los entrenamientos.
Las sirenas son importantes, los serán siempre en nuestra profesión, los cuarteles de bomberos deben contar obligatoriamente con un sistema de alarma, una sirena, para activar todos los sentidos al momento de acudir a una situación de peligro, de esta manera enfrentar los riesgos se convierte en algo serio, profesional y no en un juego al azar donde pretendemos ser héroes con poderes extraordinarios. Si lo pensamos detenidamente sin el canto de las sirenas no sería tan emocionante hacer lo que nos apasiona, ser BOMBEROS.
Sargento César Andrés Uzcátegui
Bomberos del Estado Mérida-Venezuela
Sargento Segundo, Jefe de sección, Incendio, Rescate, CBFT, Nivel I y II en Incendio Estructural
Perfil Personal: http://hermandadebomberos.ning.com/profile/CesarAndresUzcateguiCont...
Creador del Blog: www.purofuegomerida.blogspot.com
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