Sucedió de golpe, casi al mediodía: el viento abrasador bajó del Norte y pasó por la provincia durante un puñado de horas, lapso que le bastó para dejar un panorama desolador. Tras su paso, quedó un reguero de árboles y ramas de gran porte caídos, al menos 7 autos aplastados, 3 nenas heridas en una escuela, miles de personas con la electricidad cortada y por lo menos 25 focos de incendio en el Gran San Juan y alrededores. Y fue tan desmesurada la velocidad máxima del viento (95 Km/h, según la medición que la empresa Energía San Juan hizo en su estación de Pocito) como sus consecuencias, al punto que no se veía un saldo tan grave desde julio de 2006, cuando un viento Zonda que alcanzó los 120 Km/h volteó casas, hizo evacuar gente y provocó el corte de luz y agua durante tantos días que el Gobierno debió declarar un estado de emergencia en toda la provincia.
De raiz. Uno de los plátanos del perímetro de la plaza 25 de Mayo fue arrancado por completo por el viento.
Ayer era tanta la desesperación, tanto el miedo por la caída de ramas y cables y tan irrespirable el aire terroso del mediodía, que las autoridades del Ministerio de Educación se reunieron ni bien empezó el viento, y a los pocos minutos decidieron suspender las clases. La medida alcanzó a los turnos tarde y noche de todas las escuelas de la provincia, tanto estatales como privadas. Y se plegó luego la UNSJ para sus tres colegios: Central Universitario, Escuela Industrial y Escuela de Comercio. En todos los casos, la resolución tuvo validez sólo para el día de ayer (y lo mismo sucedió en los departamentos mendocinos de Malargüe y Tupungato).
El fuego avanza sin control
El fenómeno climático dejó la ciudad convertida en un escenario de posguerra. Al menos 11 árboles habían sido arrancados de cuajo por el viento Zonda, y cada cuadra que cortaba la Policía para que los bomberos pudieran reducir los troncos caídos generaba un microcaos incontenible en el tránsito, justo a la hora de cierre de comercio. Una estampa en la banquina del edificio de Tribunales, que mostraba cuatro vehículos en línea aplastados por un plátano caído, se convertía en uno de los íconos más ajustados de la jornada. Pero la mayor gravedad estaba en la escuela 11 de Septiembre, de Rawson, donde 2 moras cayeron y golpearon a 3 alumnas, que debieron ser internadas.
Como siempre que hay viento Zonda, los bomberos debieron trabajar a destajo contra los focos de incendio, que ayer superaron la veintena. La mayoría volvió a suceder en Rawson y Pocito, sobre todo en la zona del Médano de Oro, donde la Policía terminó deteniendo a un hombre acusado de estar provocando un incendio. También hubo mucho fuego en Albardón, Chimbas y Rivadavia, donde fueron recurrentes las postales de vecinos juntando agua en baldes y con manguera, y protegiéndose hasta con cascos de moto. Y en Jáchal, con el viento, se incendió el cañaveral del fondo de la conocida Finca de Atienza, cuyos caseros debieron ser evacuados por la cercanía de las llamas, que alcanzaban los 4 metros de altura.
El temporal incluso trascendió las fronteras de Cuyo. También se hizo notar en Córdoba, en la localidad de La Calera, donde 5 personas resultaron heridas, entre ellas un hombre al que debieron amputarle tres dedos de un pie porque se le cayó la tapa del tanque de agua de su casa, y 15 viviendas resultaron dañadas por el vendaval que azotó por la mañana la ciudad, según declaró a la agencia DyN el intendente Juan Domingo Etchepare. Además, el lugar se quedó sin agua potable hasta anoche.
Ráfagas de viento de más de 95 kilómetros por hora, árboles arrancados de raíz.
Según datos del Servicio Meteorológico Nacional, la furia se desató recién al mediodía: la temperatura subió de 15,7 a 30,4 grados de repente, y había tanto polvo en el aire que la visibilidad era menor a los 100 metros. A esa altura, era fuertísimo el contraste con el frío con el que había comenzado el día, incluso con temperaturas bajo cero alrededor de las 9 de la mañana. Tanto, que la amplitud térmica registrada ayer fue de casi 34 grados, con dos saltos importantes: pasó de 5,7 a 15,7 grados a las 11 de la mañana, y una hora más tarde superó los 30 grados.
Según el SMN, hoy ya no habrá viento Zonda y volverá el frío, con una temperatura máxima de 17 grados. Esos parámetros se mantendrán así hasta el sábado inclusive, y hasta hay amenazas de lluvia para el próximo fin de semana.
¡Tienes que ser miembro de LA HERMANDAD DE BOMBEROS para agregar comentarios!
Únete a LA HERMANDAD DE BOMBEROS