No hace mas de un año ya que un Agente de la Policía Federal Argentina me hiciera llegar a mis manos un Libro de la “Editorial Policial”; el cual me lo dejo ojear por unos días y luego se lo regrese. Si bien en algunos tramos del mismo no era muy generoso con los Bomberos Voluntarios no soy un experto en historia Bomberil y desconozco los hechos. Pero en su pagina 127 narraba un acontecimiento increíble refiriéndose a los Servicios prestados por los Bomberos Voluntarios de Buenos Aires en Argentina y su relación con los Bomberos Voluntarios de Santiago de Chile. Hoy nuevamente un nuevo medio global de comunicación nos permite conocernos e intercambiar pensamientos entre nuestros Bomberos sean Voluntarios o no. A continuación el texto de el Libro “Las Milicias del Fuego” escrito por el Comisario Francisco L. Romay / Comisario Inspector / de la Biblioteca Policial de la Policía Federal Argentina
La Municipalidad sancionaría oportunamente un reglamento General para las Compañías de Bomberos Voluntarios, y podría reformar en todo tiempo los particulares de cada Compañía. Los Gastos de adquisición de las Bombas, Útiles y renovación de los mismos serian abonados por la Municipalidad. Los demás gastos necesarios para la Organización y conservación de las Compañías y sus elementos deberían ser cubiertos con el producido de subscripciones voluntarias que podrían levantar en cada sección.
Igualmente disponía que por ahora, y hasta que llegara la oportunidad de levantar el registro de inscriptos, esta resolución solamente regiría para la Compañía de bomberos Voluntarios de la 5ª Sección, la que debería formarse con los vecinos de las parroquias respectivas, sobre la base de la inscripción ya realizada por la de la Concepción.
La única Compañía que comenzó a trabajar fue esta de la Sección 5ª, que precedía Don José Z. Miguens.
Al organizarse, se tuvieron en cuenta las Organizaciones similares establecidas en la ciudad de Santiago de Chile, por eso cuando estuvo en aptitud de funcionar la de la Sección 5ª, se dirigió a la Superintendencia de los Bomberos Voluntarios de la ciudad Trasandina, diciéndoles:
“Que los ejemplos de Heroísmo y Abnegación que consigna la historia de los Cuerpos de Bomberos de Chile no han podido menos que ser admirados por la juventud de Buenos Aires e inspirarle la practica del mas Santo de los Preceptos Humanos: la satisfacción del Bien por el Bien mismo.
La juventud de Buenos Aires -agrega-, tan generosa y abnegada como la Chilena, sintiéndose animada de los dulces sentimientos de caridad y amor, se han constituido en Cuerpos de Bomberos Voluntarios, encomendándose al mismo tiempo la grata tarea de participárselo al Señor Superintendente con el fin de que se sirva manifestar al Cuerpo de Bomberos de Santiago, que los Bomberos Voluntarios de Buenos Aires, se esforzaran por seguir la noble zenda trazada por la juventud que forma parte de los Cuerpos de Bomberos de Chile en su carrera de hechos heroicos que le servirán de ejemplo”.
La Fundación de la Compañía de Bomberos Voluntarios de Buenos Aires coincidió con la instalación del telégrafo entre las dos ciudades. Por eso, el Superintendente de Bomberos de Santiago de Chile dirigió al de los Voluntarios de Buenos Aires el siguiente telegrama, en contestación al saludo que le habían enviado.
“Santiago, Julio 28 de 1872. Reciban los nobles y generosos Bomberos Voluntarios de Buenos Aires en la persona de su digno Presidente, la cordial correspondencia a su afectuoso saludo de parte de los Bomberos Voluntarios de Santiago.
Desde la fecha y por esta vía repercutirá en nuestros corazones la alarma de incendio de la Patria de San Martín y Las Heras, y por ella misma llegaran instantáneamente a vuestros oídos. Por sobre las mas altas Cordilleras del mundo y a traves de inmensos desiertos, nuestros Hurras! A vuestros abnegados esfuerzos y a vuestras incruentas victorias.
Si el genio de la guerra pudo inspirar al Gran Capitán del Siglo aquellas audaces palabras: “Soldados, desde la cumbre de esas pirámides, cuarenta siglos os contemplan”, merced al genio de la Paz y del Progreso podemos decir hoy con vigorosa propiedad de obreros del bienestar común: el pueblo del Mapocho se enlaza con la Reina del Plata.
¿Y que mucho Señor, si es hoy Presidente de vuestra Republica el que ayer era maestro en la escuela de la nuestra? ¿Vuestra Republica?
¿Tiene acaso Limites la Patria del Bombero?
Inspírense los pueblos en el espíritu de nuestra Institución, multiplíquense los telégrafos y los ferrocarriles y la América toda será nuestra Republica.
Hagan su oficio la Bombas a metralla en la viejas Monarquías; reservemos para nuestras jóvenes Republicas las Bombas contra Incendio.
Firmado José Bessa, Superintendente.”
Este es el libro que yo menciono y de donde copie el texto
¡Tienes que ser miembro de LA HERMANDAD DE BOMBEROS para agregar comentarios!
Únete a LA HERMANDAD DE BOMBEROS